lunes, 24 de junio de 2013

Un bote.

Quisiera dormir en un bote de remos,
con la mujer del genio, la furia y la elegancia,
una mujer peligrosa
para un bote de madera.

Quisiera dormir en un bote de remos,
blanco, marfil,
con unos remos de madera obscura,
pesada.

Quisiera dormir en un bote de remos
con la mujer audaz,
la del tapado rojo, los cigarrillos,
del sexo, la ternura y del arte.

Quisiera dormir en un bote de remos
en el medio de un prado,
casi enterrado...
y pararme a mear de vez en cuando,
comer sobre nuestras rodillas
sin lavarnos las manos.

Quisiera dormir en un bote de remos,
exhausto, adolorido,
y adorar la niebla, con ella morir de frío,
y tiritar vapor... el mismo.